miércoles, 27 de agosto de 2014

SU SR GREY



Ha llegado al hotel y antes de subir la ha llamado y le ha dado unas directrices bien claras. "Cuando llegue a la puerta llamaré. Abrirás la puerta pero no del todo. Lo dejarás de tal manera que con empujar la puerta pueda entrar. Y tú estarás en medio de la habitación, de espaldas a la puerta, con las manos por detrás y sujetando el antifaz."
Y él ya está en la puerta de la habitación. Ella está dentro y espera que esté vestida como lo pidió. Con ese conjunto de liguero, medias y sujetador que le mandó en las fotos. Pero sin más ropa interior.
Toca la puerta y oye como la abre y la deja entornada. Él la empuja y entra. Ella está en medio de la habitación pero no está de espaldas como le pidió. Le está mirando. Ha contravenido una orden que le dio y tendrá sus consecuencias. Él entra le coge el antifaz y se lo pone. La rodea pasando su mano por su cuerpo mientras la susurra, "no has hecho lo que te dije" . Coge las esposas que están encima de la cama y se las pone con las manos por detrás. Desde atrás le empieza a besar el cuello mientras la rodea con sus manos por delante. Ella se mueve y pega su espalda al cuerpo de él y se empieza a mover. Se está agitando. Entonces le da un azote en el culo por no haber obedecido. Ella suelta un pequeño gritito. La lleva hasta el borde de la cama y le quita el sujetador. Le mordisquea los pezones hasta ponerlos erectos. Le mete la mano entre las piernas y se encuentra la piel bien depilada. Como le gusta. Busca su clítoris y lo empieza a acariciar. Ella se empieza a mover nerviosa, agitada y empieza a respirar fuerte. Le abre las piernas y le introduce un dedo y empieza a comprobar que está muy húmeda. Coge uno de los consoladores y se lo empieza a introducir. Se lo deja dentro en marcha.
Le quita las esposas y le dice que se apoye sobre la cama. Coge el consolador por detrás y sigue jugando con él. A su vez coge el otro consolador, le pone un preservativo y lubricante. Se lo empieza a introducir por detrás y ella arquea su espalda mientras gime de placer. Coge los dos consoladores y los empieza a mover dentro de ella. Hacia fuera y hacia dentro. Ella está muy excitada. Y entonces saca el consolador del culo y se la introduce con fuerza mientras le da unos azotes. Ella no para de moverse acompasando el movimiento con el suyo. Cada vez mas fuerte. Y cada vez que le da un azote pide otro. Y otro. Hasta que no pueden más.
Él la coge de las caderas fuertemente, ella grita, le da un nuevo empujón, mucho más fuerte que los anteriores. Pero esta vez no se separa de ella y los dos llegan a un orgasmo como hacía tiempo.
Sin separarse de ella la empuja hacía la cama y caen en ella sin soltarla y sin separarse. Agotado se deja caer a su lado y la besa.

lunes, 25 de agosto de 2014

ÉL LE ESCRIBE A ELLA



Hacía mucho tiempo que llevaban esperando volver a estar juntos. Y por fin se volvían a ver.
En el momento en que sus ojos se miraron volvió a surgir la chispa, la complicidad y el deseo que ambos anhelaban. Se abrazaron fuerte, se olieron y se besaron como hacia tiempo que no lo hacían.
Él empezó a acariciarle la nuca y el cuello. Notaba como su respiración se agitaba y le latía el corazón cada vez más fuerte.
Bajaba la mano por su blusa desabrochando uno a uno los botones. Metió la mano dentro y empezó a acariciar sus pechos. No llevaba sujetador y le gusto notar directamente sus pezones. Estos se excitaron casi de inmediato al notar como los acariciaba y los pellizcaba. Ella emitió un jadeo casi ahogado y se apretó a él. Le quito la blusa y la dejo caer.
Ella hizo lo mismo con su camisa. Se la abrió y hundió su mano en su pecho y empezó a acariciarlo. Luego acerco su boca y empezó a besar sus pezones. Él respiraba aceleradamente mientras cerraba los ojos y sentía como le mordía y le besaba. Una vez que le quitó la camisa se fundieron en un abrazo sintiendo el calor de sus pechos.

Él se separo de ella y la volvió a besar con pasión. Saboreando sus labios. Mientras la fue empujando suavemente hacía el interior de la habitación. Poco a poco hasta llegar al borde de la cama. Entonces le dio un último empujón y la hizo sentarse. La pidió que se tumbara y ella obedeció expectante.
Él se inclino hacía ella y empezó a besarle por el cuello. Ella giraba la cabeza, se mordía el labio y disfrutaba con cada beso, con cada mordisco y con cada caricia. Fue bajando su boca por el cuello mientras con las manos acariciaba sus pezones. Completamente erectos. Los mordió, los chupo y los retorció con sus dedos. Ella seguía gimiendo mientras susurraba "melenas!!!"
Bajó hasta el ombligo con su boca mientras con sus manos empezó a meter la mano por debajo de su falda. Apretándole los muslos. Le empezó a desabrochar la falda y cuando lo consiguió ella levanto el culo para que se la quitara. Entonces quedó al descubierto su sexo. El la miró complacido. Estaba afeitado y no se había puesto la ropa interior como le había pedido.
Ella le miraba expectante. Estaba deseando que lo hiciera. Cuanto antes mejor. Y el no dudó. Bajó su cabeza y empezó a buscar su clítoris con la lengua. Ella respiraba muy fuerte y gemía. Estaba llena de placer y disfrutando cada momento. La metió un par de dedos en la boca y los mojó y mordió. Después introdujo esos dedos dentro de ella y empezó a acariciar su interior mientras con su boca y su lengua chupaba y jugaba con su clítoris. Ella arqueaba su espalda a cada contacto de la boca con su clítoris.

.........(continuará)

AQUEL PRIMER RELATO QUE NUNCA LLEGÓ A CUMPLIRSE


Por fin había llegado el día. Ella estaba en el tren ya de camino a Madrid. No le faltaba mucho para llegar aunque a ella se le estaba haciendo eterno. Pero hacía que un viaje en tren se le estaba haciendo tan "largo" pero a la vez tan placentero. Con ella llevaba una pequeña bolsa con un poco de ropa y sus cosas. Esas cosas que esperaba poder enseñarle. Hacía mucho que no se veían, se tocaban,....
Ya estaba entrando en Madrid. En media hora estaría en el hotel. No se lo podía creer. Pero sabía que aún le tocaba esperar un poco más.

Según entraba en la habitación del hotel veía que no eran muy diferentes unas de otras. Sencillas y prácticas. Pero parecía que había algo en el ambiente. Probablemente era su impaciencia. Sus ganas de que él llegara cuanto antes. De estar juntos. Aún faltaba. Había que tener paciencia. Mientras se prepararía y se pondría cómoda. Saco la ropa que se iba a poner de la bolsa y la estiró encima de la cama. Puso a sus pies los zapatos de tacón que hacía tiempo que no se ponía. Desde la última vez que se vieron. Le traía tantos recuerdos!!!!!

Eran las 19:30 horas y aún no había llegado. Ella estaba medio vestida. No es que llegara tarde, es que ella estaba impaciente. Volvió a repasar la ropa y todo lo que había traído. En eso estaba cuando oyó unos golpes en la puerta. Alguien llamaba. Su corazón se aceleró y corrió a abrir. Era él. Según lo tuvo delante no le dejo ni entrar cuando se abalanzó sobre él y le beso. Hacía tanto tiempo!!!!!!
Entraron en la habitación sin soltarse. Sin separarse hasta que llegaron a la cama y se tumbaron abrazados. Y siguieron besándose y abrazados. Pasado un rato se separaron para verse mejor. Parecía mentira el tiempo que había pasado. Él se sentó y se quito su cazadora azul y empezaron a ponerse al día. Pero en esta ocasión los problemas que cada uno tenían no parecían tan graves. Sería porque contarlos en persona hace que suenen mejor que por teléfono. Sentir el aliento del otro según te habla es otra cosa. Hace las palabras más vivas. Lo hace todo más cercano.

Pasado un buen rato él propuso ir a dar una vuelta y cenar algo. Había pasado ya un tiempo desde que él había llegado pero no sabían cuanto. Habían perdido la noción del tiempo.
Se levantaron de la cama y mientras él se ponía el abrigo ella se calzó. Cogió su abrigo, su bolso y se acercó a la bolsa de viaje. Cogió algo de el y lo metió rápidamente en el bolso. Parecía esconder algo. Y salieron por la puerta. Se volvieron a besar en el ascensor y salieron por la puerta del hotel. Hacía frio pero les daba igual. Parecía que no lo sentían. Y se fueron a cenar. Como la primera vez que se conocieron...........

jueves, 21 de agosto de 2014

RELATO DE OTRO ENCUENTRO SEXUAL

Después de más de un año ella se decidió por fin a hacer ese viaje que tanto le asustaba,en el tren,pensaba en él,en los momentos pasados juntos,en todo ese tiempo sin verle,en las cosas que se habían dicho....Valía la pena?En su interior sabía que sólo sería verle una vez más y luego volver a la realidad,a lo que pasó hace un año cuando lo dejó atrás,volver al dolor de nuevo,pero necesitaba verle,para no repetirse cada día lo has perdido porque no lo has intentado,él te ha pedido que vayas y no lo has hecho.
Por fin llega a Madrid y se aloja en el hotel,parece que el tiempo no pasa,necesita que llegue y de pronto escucha la puerta,esa voz...es tan familiar,se besan y ella acaricia su pelo suavemente,se cogen de la mano y se sientan sobre la cama.Tienen tanto que decirse,que no saben ni quieren empezar,tan sólo disfrutar el uno del otro y dejar la charla para no estropear ese momento;hacen el amor recordando viejos tiempos pero es una mezcla de pasión y cariño,como esa mezcla del afecto que él siente y el amor que ella siempre ha sentido por él,amor no correspondido y que a ella siempre le ha confundido,porque a su entender el afecto es otra cosa muy diferente a lo que él le ha demostrado siempre tener hacia ella.
Después de esos momentos de felicidad que le ha robado,salen a cenar,ella temerosa como siempre porque sabe que hablar con él en serio siempre significa tener conflicto y lo único que desea es estar con él y no separarse de su lado,pero sabe que no es a ella a quien quiere,aunque la desee,aunque a pesar de la distancia y el tiempo transcurrido inexplicablemente siga pensando en ella ¿incoherente? ,para él nunca lo ha sido,aunque ella no pueda entenderlo,así que evita la conversación y se deja llevar por él.
Un café,una copa y de vuelta al hotel ya más tranquilos vuelve otra vez esa pasión que siempre les ha acompañado ,vuelven a hacer el amor como si supiesen que es la última vez que van a verse,arrancándose cada beso,cada caricia..............
Por fin es sábado. El ya ha aparcado el coche y se dirige al hotel. Le ha costado aparcar. O a lo mejor han sido las ganas de hacerlo cuanto antes.
Mira el móvil y ve el número de la habitación en el mensaje que le ha mandado. Aprieta el paso. Está cerca.

Esta puerta es. La toca y oye la contestación del otro lado y los pasos que se acercan. Abre la puerta y allí está. Ella le coge la mano y lo mete dentro. Se miran y se besan. Hacía mucho tiempo que no se veían. Cuando van al interior de la habitación él ve lo que lleva puesto. Esos zapatos de tacón que no se había vuelto a poner. Y lleva puesto un conjunto muy sexy y provocativo. Que enseña lo justo para querer ver más.
Se sientan en la cama, se miran, se dicen 2 palabras y se abrazan. Se besan y se acarician. Se tumban en la cama y se empiezan a desnudar. Él le empieza a quitar la ropa mientras besa todo su cuerpo. Ella le corresponde con lo mismo. Saboreandose, tocándose y haciendo el amor como hacía tiempo que no lo hacían.......

viernes, 1 de agosto de 2014

RELATO ENTRE DOS AMANTES




Te esperaré en la habitación desnuda y viendo a la pared, escucharé tus pasos poco a poco acercándose, como abres la puerta, el roce de tus manos al tocarme y tus labios besando mi cuello. Pero tú eres bueno conmigo y aunque luego sigamos el juego me giraras para que pueda verte, abrazarte y besarte después de tanto tiempo otra vez; después de eso sí empezarás a jugar tapándome los ojos con el fular negro. Me llevarás suavemente hacia el baño y me ayudarás a entrar en la ducha, llenarás mi pubis de espuma de afeitar y empezarás a rasurarme, yo empezaré a gemir porque el contraste del calor de mi cuerpo y el frío de la espuma será mortal, saber que me estás tocando y te tengo tan cerca me tendrá demasiado excitada; me lavaras cuando termines y no podrás resistirte a masturbarme porque notarás que estoy empapada esperándote. Me llevarás delante de la cama y te harás con las cuerdas que has visto sobre la mesa, empezarás a colocármelas alrededor del cuello, rodeando el pecho y sujetando mis brazos atrás; sabes cómo quieres atacarme y cómo quieres poseerme, en principio no hay más cuerdas. Una vez estoy atada me dejas así y empiezas a desnudarte, para dote de vez en cuando para besarme. Siento que te acercas y empiezas a tocarme, me acaricias, dios necesito sentirte dentro ya, y de pronto siento la embestida suave pero precisa, siento que voy a estallar de placer, volvemos a aquellos juegos, siento como mis orgasmos son continuos y tú no paras de darme placer. Gimo de placer como hace tiempo no lo hacía, hay tanto deseo, nos fundimos en un orgasmo compartido que nos deja extenuados y te dejas caer pegado a mí sin dejar de abrazarme. A medida que nos recuperamos empezamos a charlar, dulcemente, con cariño, me has quitado el fular de los ojos y puedo verte aunque continúo atada. Me sueltas un rato las manos y por primera vez puedo acariciar tu cuerpo desnudo, miro tu pene erecto de nuevo y me acerco a besarlo suavemente empezando en la punta hasta la base, mordisqueando suavemente los testículos, lo introduzco en mi boca suavemente, noto como te estremeces de placer, eres mío, tu pene vibra cuando acelero el ritmo, me encanta sentirte así, pero ahora quiero  follarte , y voy a cabalgarte dándote la espalda ,quiero sentirte otra vez dentro de mí, nos adosamos de nuevo y nuestros gemidos suenan al unísono hasta volver caídos rendidos otra vez.

Te gustó poseerme así de nuevo atada como antiguamente? rasurarme como te gusta que esté para ti? No lo sé. Éstas fotos también van a gustarte, están elegidas con mimo, me gustan, las veo y pienso en ti y en mí, en las cosas que descubrimos juntos y en todo lo que nos estamos perdiendo. Pero también me gusta el sexo vainilla, que seas tú quien me desnude suavemente, besando cada centímetro de mi cuerpo, poder verte y tocarte, creo que sin duda el viernes dará para ambas cosas y quizás necesite el vainilla primero, aunque me seduzca ducharme contigo y reírme mientras me rasures porque será un trabajo que dejaré para que hagas tú, quiero sentir tus manos mientras lo haces, mi sexo húmedo con tu contacto y mi deseo aumentando por segundos pidiendo que termines y me folles de una vez. Sentir que eres mío y que lo que pase fuera no importa, que somos tu y yo, disfrutando de esa pasión que nos ha perseguido siempre, luego si quieres podemos jugar con las cuerdas y empezar de nuevo sin que pueda tocarte y tú mandas, tú decides.
Ya estoy en la habitación. Llamo y escucho tú voz como me pides que espere. Te siento ir deprisa a la puerta y como la liberas. Cuento hasta 3 y entro.
La habitación está a medio oscuras. Tú estás en medio de ella tal y como te dije. Con el liguero, el sujetador negros y el antifaz puesto, subida en los tacones y con la cuerda en las manos a la espalda. Me acerco a ti lentamente observándote. Se te nota que estás impaciente. Cuando estoy a tú altura te cojo el culo y te lo aprieto. Tú te sobresaltas y das un pequeño respingo. Te susurro al oído un hola que te sabe a gloria. Entonces te doy un azote suave.
Cojo la cuerda y te ato las manos por delante. Mientras rozo con ella tú cuerpo y consigo agitar un poco más tú respiración. Te rozo la boca con mis labios y nos besamos. Tú intentas subir las manos pero yo no te dejo. Te tengo sujeta por la cuerda.
Te llevo hasta el cuarto de baño y te meto en la ducha. Te empiezo a tocar buscando tú clítoris. Está algo húmedo. Luego empiezo a echar la espuma por todo el pubis y te mueves nerviosa. El frío de la espuma está haciendo su efecto. Cojo la cuchilla y empiezo a afeitarte. Te gusta, te excita. Entonces te quito el antifaz y te dejo que termines. Tú me miras con ojos de quererlo todo. Con muchas ganas de tirarte encima de mí pero no te dejo. Cuando terminas te paso la mano para comprobar que está bien afeitado. Está muy suave y me gusta. Te vuelvo a tapar los ojos y te saco del baño. Te tumbo en la cama y te ato los pies con las manos. Es una posición un poco incomoda pero me permite tenerte completamente expuesta. Entonces empiezo a jugar con tú clítoris de nuevo. Lo toco, lo acaricio, lo beso mientras tú te estremeces. Entonces empiezo a jugar también con tú ano. Tú no sabes cómo moverte. No puedes parar. Te digo que te tienes que correr. Cojo un consolador y te lo introduzco por detrás mientras mis dedos acarician tú interior. Una y otra vez hasta que me suplicas que no pare. Y entonces lanzas un gemido casi ahogado y llegas al éxtasis. Tú vientre se convulsiona como si quisieras echar algo de dentro de ti. Te saco el consolador pero con los dedos sigo acariciándote mientras tú vas relajándote poco a poco. Te dejo tumbada en la cama. Te desato los pies de las manos pero no te suelto del todo. Sigues atada. Empiezo a besarte y esta vez si te dejo que muevas los brazos con las manos atadas. Entonces te das cuenta que estoy vestido. Y te digo al oído, “te toca a ti".......